jueves, 29 de junio de 2017

Joyitas del diseño del día a día

Que sí, que es un cepillo normalito de 1 € del Mercadona. Que eso no tienen que ver con que el diseño me enamora.


Podéis ver en la foto cómo se pliega y despliega. queda cogido perfectamente por los laterales del cabezal del cepillo, por lo que no se abre.
El plástico y su textura es muy bueno.
Cosas que no se ven en la foto y que enamoran:
El detalle de que al cerrarlo haya un agujerito a la altura de las cerdas y que la ranura que permite abrirlo hace que haya un flujo de aire constante que pasa a través de las cerdas.
Lo que evita que la humedad se quede ahí y favorece que no se produzca moho y que las bacterias no proliferen.
La cara interna donde se guarda el cepillo no tiene recodos, por lo que es más complicado que el agua y la suciedad queden atrapadas. Y en el raro caso de hacerlo puede limpiarse con facilidad usando otro cepillo o incluso frotando con suavidad con el dedo o una esponja y jabón.

Lo único que no me gusta es el tamaño del cabezal con las cerdas, me resulta un poco pequeño (por gusto) y lo ancho que resulta también para mi boca (es lo que tiene tener la boca pequeña) te acostumbras en unos usos.
Pero quitando eso, la verdad es que me ha parecido genial.

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